Un amigo le ofreció comprar el saldo de un negocio que había cerrado, y aunque los productos que quedaban eran pocos y difíciles de vender, aceptó y fue pagando en cuotas. Así, en 2007, comenzó la historia de El Iraní. Instalaron el primer local en una calle de tierra del barrio, al lado del taller de herrería. Lo usaban como oficina, y si llegaba algún cliente, lo atendían ahí mismo. Al principio vendían cosas que necesitaban para sus propios trabajos: materiales de soldadura, artículos de construcción… Poco a poco, con esfuerzo y constancia, fueron ampliando la oferta. Algunos vendedores que conocían al antiguo dueño se acercaron, y el negocio empezó a tomar forma. “Yo tenía muchos clientes de herrería, y la gente fue llegando”, cuenta. En esa época también viajaba seguido a Posadas y Oberá para traer lo que faltaba. Si alguien pedía algo especial, él prometía: “Pasado mañana te lo traigo”, y cumplía. Hoy, la ferretería ofrece desde herramientas hasta materiales para techos, instalaciones eléctricas, sanitarios, pinturas, y todo lo necesario para levantar una casa, excepto la madera. “Si tuviéramos madera, tendríamos absolutamente todo”, dice con humildad. Valores que construyen confianza Más allá de los productos, lo que distingue a El Iraní es el trato humano. La empresa familiar se apoya en valores profundamente arraigados, transmitidos desde su formación religiosa: ser justos, humildes, y ponerse en el lugar del otro. “El objetivo nunca fue ganar plata, sino hacer servicio”, afirma el dueño. “La recompensa económica viene después, cuando uno sirve de verdad”. Cree en la importancia de acompañar al cliente, explicar, asesorar, y nunca dejarlo sin respuesta. “Nosotros fuimos aprendiendo con la gente, y la gente respondió”. Con humildad, recuerda: “No sabíamos nada, empezamos de cero. Pero siempre con la idea de ayudar. Lo que yo sufrí, trato de evitar que otros lo pasen”. Su familia entera participó de ese esfuerzo. Hoy, sus hijos también trabajan en el negocio, representando una nueva generación que continúa con los mismos valores.